El idioma común de la belleza

ABC 20-11-09 (JULIO BRAVO )

La danza posee la universalidad de su lenguaje destrabado y comprensible, que hace posible que los sentimientos viajen sin pasaporte. No siempre, sin embargo, hablan los artistas el mismo idioma, y muchos esperanzadores encuentros se quedan en simples intentos de comunicación. No es el caso de «Dunas», un trabajo que lleva la firma conjunta de María Pagés -singular y fascinante creadora de nuestro flamenco- y Sidi Larbi Cherkaoui, uno de los nombres de referencia de la joven danza contemporánea europea. Ambos han trenzado su indiscutible arte para lograr una pieza magnética, donde cada uno de los dos mantiene su personalidad para retratarse en un paisaje común.

«Dunas» es una pieza de una extraordinaria belleza, una catarata de imágenes y sonidos que envuelven al espectador. El diccionario de la RAE define la belleza como «propiedad de las cosas que hace amarlas, infundiendo en nosotros deleite espiritual». Y eso es, precisamente, lo que consiguen María Pagés y Sidi Larbi Cherkaoui con un trabajo acariciador y magnético. Los dos artistas han encontrado un espacio común en el que expresarse con naturalidad sin chocar con el otro. Hay entre los dos una admiración y un respeto mutuo que se transparenta en escena; también su enorme clase y elegancia como intérpretes y como creadores, su desbordante imaginación. El espectáculo presenta momentos impagables, como cuando Cherkaoui dibuja sobre una pantalla de arena que se proyecta en uno de los telones y prolonga en incontables trazos el baile de María. Los dos son instrumentos afinados con el mismo diapasón, magníficos bailarines, coreógrafos deslumbrantes… Y «Dunas» el encuentro feliz de dos lenguajes que buscan el idioma común de la belleza.